La pandemia por COVID-19 ha trastocado todos los ángulos de nuestro día a día, desde el trabajo hasta el familiar o social. Actualmente, todo está influenciado por esta situación, hasta las actividades más simples como salir a pasear. Otras, hemos tenido que “eliminarlas” de nuestras rutinas. Pero, ¿qué ocurre si necesitamos quitar piojos durante el coronavirus? ¿Qué ocurre si tenemos que afrontar una situación de esta índole mientras nos encontramos en confinamiento?

Lo primero que hay que tener presente es que los centros especializados en pediculosis se encuentran cerrados durante esta fase del estado de alarma. Por lo tanto, si aparecen piojos en la cabeza de nuestros hijos (o en la nuestra), es nuestra obligación y responsabilidad enfrentarnos a ellos.

Hay que saber también que, por suerte, es más difícil (aunque no imposible) que se den casos de piojos durante el coronavirus. Estar “encerrados” en casa sin poder salir a jugar, al colegio o a hacer deporte reduce al mínimo las posibilidades de contagio. Aunque, como hemos mencionado, no es imposible.

Así, se nos presentan distintas situaciones:

  1. El contagio se produjo antes del confinamiento, pero no tuviste tiempo a acudir a un profesional. En esta situación, lo ideal es adquirir una lendrera ASSY 2000 (MARCA ASSY). Se trata de una herramienta realmente eficaz que nos permitirá ir retirando uno a uno a todos los piojos y liendres. La encontrarás en farmacias y también en internet.

Es importantísimo pasar la lendrera de manera regular todos los días para ir quitando todo (o la mayor parte) del problema. Un pequeño consejo que os ofrecemos es el de trabajar siempre con el pelo húmedo, ya que resulta mucho más sencillo.

El primer día será, con toda seguridad, el de más trabajo. En los siguientes, lo ideal será realizar una revisión de toda la cabeza hasta que consigamos no retirar ni un solo piojo o liendre. Una vez que el aislamiento haya finalizado, acuérdate de acudir a tu especialista para una revisión profesional.

  1. La segunda situación que se puede dar es que el aislamiento por piojos hubiera llegado en medio de un tratamiento. En este caso, no habrá más remedio que llevar a cabo revisiones caseras para comprobar que la cabeza de nuestro hijo o hija está completamente a salvo de pediculosis.
  2. El tercer supuesto sobre piojos durante el coronavirus tiene que ver con que el contagio o la detección se hubiera dado durante el aislamiento. Si esta es tu situación, habrá que repetir la actuación del primer punto y utilizar la lendrera como defensa hasta que podamos estar en las manos de un equipo de especialistas.

Si necesitas ayuda o asesoramiento profesional, hay centros con amplia experiencia en quitar piojos. Solo tienes que confiar en verdaderos expertos y verás cómo este inconveniente se resuelve de la manera más rápida.